Con la llegada de la primavera y la floración de los almendros me vienen a la cabeza un montón de recuerdos de mi viaje a Japón. Fue solo hace dos años y en esta época, pero con el tema del Covid ya me parece una eternidad.
Un viaje que surgió un poco de improviso, y que gracias a que no pude planificarlo como a mi me gusta, me dio la oportunidad de fluir cada día, y de explorar cada rincón al ritmo que me pedía el cuerpo. Sin agobios y con prisas las justas. Tenía un mes por delante para conocer una cultura muy diferente en la que todo te llama la atención, y con la que aprendí cosas nuevas cada día. Sinceramente, una auténtica gozada.
Me he animado a escribir este post porque si algo me impresionó, fue descubrir la importancia que para los japoneses tiene la primavera. El azar quiso que coincidiera por fechas con esta fascinante estación, en la que los días se hacen más largos y el sol empieza a calentar animando a que broten las primeras flores. Entre ellas, la del cerezo es todo un icono en Japón, y su floración un motivo precioso para festejar.
La floración de los cerezos japoneses o ‘sakura’
Es uno de los mejores -y más bellos- espectáculos que te puede ofrecer Japón en primavera. Las flores de sakura tiñen en tonos blancos y rosas empolvados los paisajes, las montañas y los parques sirviendo de inspiración a numerosos poetas y pintores a lo largo de los años.
La flor del cerezo en la cultura japonesa es símbolo del renacer, de la propia vida y de la belleza.
Con la Sakura también empieza una época de celebraciones súper esperada y conocida como ‘hanami’.
El ‘hanami’, la contemplación de las flores
El Hanami es como se conoce en Japón al ritual de contemplar las flores de cerezo durante la primavera. Una costumbre que históricamente proviene de mezclar las celebraciones de la nobleza para contemplar las flores y, de los picnics de las clases populares.
Disfrutar de la efímera belleza de estos árboles es todo un acontecimiento que yo desconocía y que, como una japonesa más, aproveché para inmortalizar con mi cámara desde Tokio a Kyoto pasando por Takayama y Osaka. Todas las fotos que estáis viendo son mías. 😉
Disfrutar del Sakura, uno de los espectáculos de la naturaleza más celebrados de Japón
En cualquier ciudad japonesa, la floración de los cerezos es una razón de peso para juntarse con amigos y familiares y, celebrar juntos el hanami. Se reunen en los parques para pasear mientras se paran a contemplar los cerezos más bonitos y se sacan fotos junto a las ramas más hermosas (puedes encontrar verdaderas filas para inmortalizarse con los cerezos), pero también es súper típico organizar picnics debajo del sakura. Además se celebran un montón de festivales al aire libre y celebraciones para conmemorar esta bonita estación.
Los parques más famosos de Tokio como Uoeno o Sumida, tenían pintado en el suelo líneas para señalizar los diferentes espacios y algunos incluso se enumeran, como si fuera un parking. Así de ordenados son los japoneses. A la hora de sentarse por lo general colocan lonas de color azul en el suelo y encima unos cojines o un mantel, donde poner el picnic.
Me sorprendió que ya desde primera hora y aunque hacía bastante fresco, había gente en los parques sentada en las lonas azules reservando estos lugares tan codiciados y conocidos como «bashotori«.
Por lo visto tienen una costumbre en la que el novato de la empresa debe hacerse cargo de buscar y guardar estos sitio, el “bashotori». Dicen que es la primera gran responsabilidad que les dan y efectivamente yo ví a varios “ejecutivos” vestidos de traje en estos “reservados” y trabajando con el ordenador en el suelo. Ingenua de mi pensaba: «fíjate qué avanzados los japoneses con el teletrabajo»…
En los bashotori ves gente de todas las edades, familias enteras con los niños y los abuelos, amigos, parejas… A cualquier hora y en cualquier momento mientras dure la floración. Se juntan para comer y beber mientras pasan un buen rato debajo de los cerezos en flor, una costumbre que me pareció preciosa.
¿Te imaginas que un martes normal y corriente de finales de marzo, te reunieras con tu familia al completo para hacer un picnic en el Retiro debajo de un cerezo? Y que esto fuera lo más normal del mundo… Y todo terminase igual de limpio que como estaba. Demasiado utópico para nosotros.
La temporada de los cerezos en flor: fechas
La floración de los cerezos varía año a año y es diferente en cada zona del país. Suele comenza al sur del archipiélago, en Kyushu, a finales de marzo y se va extendiendo paulatinamente hacia el norte, alcanzando las islas de Honshu y Hokkaido a principios de abril.
De todas formas, en este enlace puedes ver el pronóstico 2021 para los cerezos en flor en las principales ciudades de Japón.
¿Dónde ver la floración de los cerezos en Japón?
Sakura en Tokio
En parques como el Jardín Nacional de Shinjuku Gyoen (alberga docenas de especies de cerezo), en el Parque de Ueno (donde podrás alquilar un patín en forma de cisne y navegar por el estanque o subir al templo Kiyomizu Kannon y contemplar las preciosas vistas), Sumida Park (con preciosas vistas al Tokyo Sky Tree y al río y muy cerca del templo Sensoji, en Asakusa).
No puede faltar el río Meguro, uno de los lugares más conocidos y populares para ver las flores de cerezo en Tokio. Es un lugar muy famoso y suele estar a tope de gente sobre todo el tramo de Nakameguro. Otra zona es el foso de Chidorigafuchi cerca del Palacio Imperial, en el Parque Inokashira, un poco más alejado pero muy conocido o, en Koishikawa Korakuen uno de los jardines más famosos de Tokio.
Aquí tenéis 5 itinerarios creados por el blog Japonismo para ver el sakura en Tokio
Sakura en Kioto
El sendero Tetsugaku No Michi, traducido como Paseo de la Filosofía o Camino del Filósofo, transcurre entre el Pabellón de Plata o Ginkakuji, al norte de Higashiyama, hasta el templo Nanzenji, al sur, pasando por el templo Eikandō.
La Cuesta Keage. Una vía férrea por la que se transportaban los barcos en unos vagones, para que Kioto pudiera abastecerse de productos gracias a este medio de transporte. En la actualidad este tramo carece de interés salvo cuando llega la primavera, momento en que se cubre de flores gracias al centenar de cerezos plantados a ambos lados de la vía que crean una atmósfera muy bucólica y romántica.
Y además… Para ver los árboles del cerezo en flor, también merece la pena acercarse a otros lugares como el Castillo de Nijo, sitio Patrimonio Mundial de la UNESCO, el templo Kiyomizu-Dera, el parque Maruyama-Koen para ver las iluminaciones por la noche, el Templo Toji (con la clásica escena de los cerezos frente a una pagoda de cinco pisos). Pasear por la calle Shimbashi-dori, Gion cuyos cerezos forman un precioso túnel alrededor del canal, y el Jardín Botánico de Kyoto, también llamado Kyoto Shokubutsu, entre otros.