Conocido como «el paraíso al final de la tierra»o «el hogar del arco de piedra» con una temperatura media todo el año de 15 a 32 grados y 360 días de sol al año, desde que se impuso en el mapa del turismo mundial, es el destino premium de México, y el lugar de vacaciones preferido de americanos y canadienses.
Relájate, absorbe la maravillosa naturaleza de Los Cabos y descubre en qué consiste este paraíso de aguas templadas y arena suave cuyo eslogan nos incita a dejarlo todo detrás, “Los Cabos, leave it all behind”.
A hora y media de vuelo desde la capital méxicana nos espera este idílico lugar en el que te reciben con una bandeja de margaritas y donde se ha fotografiado a más de una celebrity de vacaciones. Portada de revista, seguro que la espectacular imagen de un arco de piedra por el que se filtra una impresionante puesta de sol con el mar como telón de fondo te resulta familiar, y es que el Arco del Fin del Mundo es el icono de esta región.
Unos metros antes de esta original formación se encuentra otro lugar para perderse, la Playa de los Enamorados, donde el mar de Cortés y el Océano Pacífico se “besan” cuando sube la marea. Para llegar tendrás que subirte a una panga –pequeñas embarcaciones que funcionan como taxis- y pedirle al conductor que la parada sea este precioso refugio de arena. ¡Ojo no te vayas a pasar porque unos metros más hacia el Pacífico se encuentra la Playa del Divorcio!
En la estación adecuada, cuando las aguas del mar están mas calientes se pueden avistar ballenas desde El Corredor. Así se llama a los 29 kilómetros de playa que separan las ciudades de San José del Cabo y Cabo San Lucas y donde se ubican la mayor parte de los resorts de lujo que suelen ofrecer el all included, además de cocina gourmet, una exquisita decoración y montones de actividades.
En los Cabos no resulta nada difícil encontrar un hotel que satisfaga todas vuestras exigencias, lo único que tienes que hacer es buscar el que más se adapte a vuestro estilo.
Para aquellos que tenéis un cupo máximo diario de relajación, de sol y playa, saber que el campo de Baja California atrae también a los aficionados a las descargas de adrenalina. Ponte el equipo de buceo y sal a explorar naufragios, atraviesa terrenos agrestes en un divertido “buggie”, aprende a hacer surf o el paddleboarding, disfruta de la experiencia de nadar con delfines, y practica el golf o la pesca deportiva.
Tras la puesta de sol, y para los que todavía tengáis ganas de continuar, después de cenar existen dos opciones, o vivir la noche en la Marina de Cabo San Lucas de pub en pub, pasando por alguna discoteca o bien algo más relajado y chic, como el pintoresco pueblecito de San José, de arquitectura colonial y cuyo centro histórico lo han transformado en el Distrito del Arte. Enfocado para los bolsillos más pudientes, las pequeñas casitas se han convertido en galerías de arte, donde una vez a la semana se invita también a catar vinos.
Playa de los enamorados