Como la Costa Azul la tenemos bastante trillada de viajes anteriores, en el roadtrip de camino a Dolomitas decidimos atravesar el corazón de la Provenza francesa con sus preciosos pueblos de contraventanas color azul, y llegar hasta Las Gargantas del Verdon, en medio del Parque Natural del Verdón, un paraje con una naturaleza espectacular donde pasamos dos noches, ¡y que fue todo un descubrimiento!
¿Qué son las Gargantas del Verdon o las Gorges du Verdon?
Ubicadas como a 1 hora y media de Marsella, al sureste de Francia, las Gargantas del río Verdon forman un impresionante cañón de piedra caliza. Dicen que es uno de los más altos de Europa y lo cierto es que las vistas que ofrecen los miradores que te vas encontrando a lo largo de la ruta son bastante sobrecogedoras. Con casi 25 kilómetros de largo y acantilados que alcanzan en lugares los 700 metros de profundidad, si algo te enamora de esta zona a primera vista, además del entorno natural, es el color verde turquesa tan bonito que tiene el agua.
Contrastes, sensaciones, y evasión en plena naturaleza
El enclave es muy popular no sólo por la belleza el paisaje, también es un sitio ideal para practicar multitud de actividades deportivas y excursiones. Desde descenso de cañones (que tiene que ser una pasada), rutas de senderismo, vías ferratas, canoa, rafting, escalada para los más avanzados (porque ya os digo que dependiendo de la zona da bastante miedito) rutas en bici, parapente…
Para realizar alguna actividad como se merece, lo normal es pasar al menos una semana en la zona, pero si, como nosotros, estáis de paso, lo fundamental para descubrir este paraje excepcional es hacer la ruta en coche que recorre las Gargantas del Verdón.
Nosotros empezamos desde Aiguines que está al oeste porque teníamos ahí el camping, pero se puede empezar también por Moustiers Sainte Marie, o si vienes por el este Castellane sería el inicio de tu ruta, para terminar directamente en el lago Santa Cruz, dándote un buen baño (que se agradece después de tanta curva).
La cornisa sublime (corniche sublime) y la ruta de las crestas o (route des crêtes)
Estas son las dos rutas que se pueden hacer en coche y que discurren por más de 140 kilómetros de carreteras serpenteantes, con un montón de miradores desde donde alucinar con las vistas. De hecho, al principio te quieres bajar cada vez que ves un mirador porque piensas que las vistas van a ser mejores que las anteriores…, pero ya te aseguro que después de 2 horas en el coche y 150 vueltas, el efecto sorpresa y la impresión se van desvaneciendo. Nosotros hicimos las dos rutas en el mismo día, y la verdad que igual es demasiado.
Si tenéis poco tiempo, la ruta de las crestas, que es también circular, pero más cortita es suficiente para hacerte una idea de las impresionantes vistas del cañón. Transcurre por una carretera bastante estrecha, de una sola dirección y con muchas, muchas curvas, pero que no defrauda. Cuenta con un total de 14 miradores en los que puedes ir parando para contemplar el paisaje, y todos te dejan con la boca abierta.
Otro de los puntos de la ruta donde hay que parar sí o sí, es el Punto Sublime, un lugar desde el cual la vista, como su propio nombre indica, es verdaderamente sublime.
En el mapa de debajo tenéis las distancias entre alguno de los pueblos más conocidos, y aunque en general parecen pocos kilómetros, tened en cuenta que estaréis circulando en carretera montaña y los kilómetros se alargan. Por ejemplo la ruta de Castellane a Moustiers que es un imprescindible, son 45km, pero puedes tardar mínimo 1 hora y cuarto y si vas parando en los miradores, pues échale por lo menos 2 horas.
—> Consejo Oro: ¡intenta llevar el depósito lleno! No hay muchas gasolineras por la zona y si realizas la ruta en verano, lleva bebida fría y algo de picoteo porque de un pueblo a otro, hay un buen trecho. Nosotros terminamos comiendo súper tarde en Palaud sur Verdon, un pueblecito muy mono que tiene un chiringuito con terraza bastante a la vista, se llama Joe Le Snaky.
Probablemente estas rutas te lleven prácticamente toda la mañana, pero no puedes dejar de visitar el lago de Santa Cruz (lac de Sainte – Croix) donde el cañón se une con el lago.
Alquila un patinete en el lago Santa Cruz (lac de Sainte-Croix)
Ese mismo día, terminamos la ruta en el lago a eso de las 18h00 cuando el sol empezaba a bajar en el horizonte y el cielo empezaba a pintarse en tonos naranjas. La estampa era preciosa y nosotros estábamos deseando darnos un baño bien merecido. Tuvimos suerte porque, aunque el lago seguía a tope de familias, ya se notaba que la gente estaba recogiendo para irse a cenar (aunque nos parezca mentira en Francia se cena a las 19h00).
Los alrededores del lago forman una pequeña playa donde te puedes tumbar a tomar el sol, o puedes sumarte al plan que por desgracia hace todo el mundo y alquilar un patinete o un kayak y adentrarte de nuevo en el cañón para poder bañarte en sus aguas azules cristalinas mientras disfrutas de un paisaje espectacular.
Como llegamos tarde y estaban a punto de cerrar, tuvimos la suerte de que ya habían devuelto algún patín, y no dudamos en alquilarlo. Aunque el precio es un poco excesivo, unos 20 euros la hora, después del paseo en coche con tanta curva estábamos deseándonos pegarnos un baño y nos apetecía sentir la inmensidad de esas paredes desde el agua. Tuvimos la suerte de que el chico del alquiler se enrolló y nos dejó subir a Eva (nuestra husky) en el patín. Aunque ella odia el agua, y al principio estaba un poco asustada, disfrutó de lo lindo.
—> Consejo Oro: nos comentó el chico del alquiler que suele haber varias horas de espera para alquilar un patinete, por lo que es mejor ir a primera hora o a última. Pero no te quedes sin vivir la experiencia de navegar por la garganta entre las escarpadas montañas, y darte un chapuzón en esas aguas. ¡Fue una experiencia preciosa!
Moustiers-Sainte-Marie, una parada imprescindible
Este pueblecito situado muy cerca del lago Santa Cruz está incluido en la lista de «Uno de los 10 pueblos más bellos de Francia» y lo merece completamente. Ubicado al pie de un acantilado que origina una cascada que divide al pueblo y lo llena de vegetación, el paseo por sus calles principales en una verdadera delicia.
En Moustiers-Sainte-Marie, la mayoría de sus habitantes vive del turismo y de la cerámica, de hecho llama la atención la cantidad de tiendas de artesanía, showrooms y galerías de arte que encuentras. Como el pueblo no es muy grande el paseo termina pronto, pero no te preocupes, si todavía tienes ganas de emociones fuertes, no puedes dejar de visitar la capilla situada en lo alto de la colina a la que se accede a través de unos cuantos escalones. Nosotros estábamos reventados y no subimos, pero las vistas deben de merecer completamente el esfuerzo.
De hecho desde la capilla de Notre Dame de Beauvoir se ve la seña de identidad del pueblo, una estrella bañada en oro que cuelga de una cadena de 135 metros entre las dos montañas.
Nos hubiera gustado cenar por allí para probar algún plato típico de la zona que por lo visto se caracteriza por el alioli, además los restaurantes parecían muy coquetos, pero estaban a tope, así que nos sentamos en una terraza a tomar un vino y a disfrutar del paisaje. Sinceramente, si hay algo a lo que no me acostumbro cuando viajas al extranjero es que no me pongan ningún tipo de aperitivo con los precios que cobran.
¿Dónde Dormir? Camping de L’ Aigle
Súper recomendable, el Camping de l’ Aigle con vistas al lago de Santa Cruz. Pasamos aquí dos noches y súper a gusto. Se respiraba un ambiente my tranquilo, las instalaciones estaban muy limpias y las parcelas eras bastante grandes. Además cuenta con diferentes tipos de alojamientos muy originales, además de bungalows tipo safari, tenía iglús con su parcela privada y otros en plan glamping. En Google le valoran con un 4,4.
Más información:
Turismo en el Verdon: http://www.lesgorgesduverdon.fr
Tenéis un montón de información en la web verdomtourism.com
Parque Natural del Verdon: http://www.la-provenza.es/parque-natural-del-verdon
Oficina de Turismo Moustiers de Sainte Marie
Turismo en los Alpes de la Alta Provenza: http://www.tourisme-alpes-haute-provence.com